El escritor y director General del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo, sostuvo este miércoles la videoconferecnia “Los libros y la lectura en la pandemia del Covid 19”, durante la cual propuso al Congreso del Estado de Sinaloa elaborar un Plan Sinaloa para fomentar la lectura en seis ciudades del estado, a través de actividades como ferias de libros, librobuses e incluso libros gratuitos.
Propuso buscar referencias que hacen que un sinaloense común y corriente se sienta orgulloso de ser sinaloense, y adelantó que el Congreso del Estado es uno de los motores para alcanzar ese objetivo.
“En los próximos dos meses podríamos formular el plan con autores, libros, historias y personajes”, adelantó.
La conferencia fue organizada por el Congreso del Estado de Sinaloa a través del Instituto de investigaciones Parlamentarias.
El funcionario Federal habló también de la campaña “Quédate en Casa, quédate leyendo”, impulsado por el Fondo de Cultura Económica ante el confinamiento provocado por la pandemia del Covid 19.
“La lectura es un mecanismo de defensa ante el COVID, además que tiene un efecto balsámico, cura heridas, y funciona como un sistema de creación, de distracción y de desplazamiento hacia otros universos. La lectura, permite trascender las fronteras del encierro; es un fenómeno sano y subversivo porque se ve con los ojos de otro”, expresó el escritor.
La diputada Graciela Domínguez Nava, presidenta de la Junta de Coordinación Política dio las palabras de bienvenida y en su mensaje apuntó que la lectura es necesaria y al Estado le corresponde organizarla como política pública para que llegue a la gente.
“Leer es necesario. Leer para la felicidad de la gente. Un pueblo que lee está en mejores condiciones de hilvanar su libertad, de ejercer sus derechos, de organizarse. Sin fuerza no hay derechos, lo dijo Goethe”, apuntó la también coordinadora del Grupo Parlamentario de morena.
La también coordinadora del Grupo Parlamentario de morena citó el libro “Pancho Villa, un biografía narrativa”, de Paco Ignacio Taibo, para ilustrar que el caudillo revolucionario no solo soñaba la educación de los hijos del pueblo. Señalando que cuando ejerció gobierno tomó medidas para avanzar en esos propósitos, antes, envió niños a estudiar en Estados Unidos, como igual, ya retirado en la hacienda Canutillo, en un momento trató de negociar una escuela de agricultura, y ahí en la hacienda abrió una escuela para niños.
Agregó que para la formación de cuadros políticos leer es imprescindible y observó que los políticos comprometidos con la gente deben hacer de la formación una necesidad de primer orden, Villa y el General Felipe Ángeles se avituallaron de libros. Villa aprovechó su encierro en Lecumberri para hacer sus primeras lecturas, y en Canutillo leía, leía libros. Ángeles en plena sierra de Chihuahua daba conferencias para la formación de las fuerzas villistas; en sus maletas portaba escritos y libros. Horas ante de su fusilamiento leía sobre la vida de Jesús.
“La lectura es necesaria, y al Estado le corresponde organizarla como política pública para que la lectura llegue a la calle, al pueblo”, concluyó la morenista.
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